miércoles

Reporte: "La loca batalla de la aniquilación"; Tankovy Batalon (URSS) y 4th Armored Division (USA) Vs. Panzerkompanie (Alemania)

Una batalla desquiciada hasta la muerte a 3.000pts entre rusos aliados con los norteamericanos contra alemanes en un remoto pueblo alemán.
Antes de las listas que se enfrentaron en esta batalla, valen algunas aclaraciones. La batalla se jugó según la disposición de la misión Free For All, pero sin toma de objetivos, los que se emplazaron pero cuya captura sólo aportó una bonificación para los ataques aéreos, que a final no tuvo relevancia en la batalla.

Luego, la condición para ganar la batalla fue el chequeo de moral. Del bando aliado se hacía por ejército sin influir en el otro. Por lo demás, se cumplieron el resto de las reglas.

Las listas (aproximadamente):

Libro: Blood, Guts and Glory
Late War 1500 puntos
American 4th Armored Division
Confident Veteran

HQ 
1x M4A1 Sherman con cañon de 76mm
135 pts

Combat Platoons:
3x M4A1 Sherman + 1x M4A1 Sherman con cañon de 76mm
385 pts

3x M4A1 Sherman + 1x M4A1 Sherman con cañon de 76mm
385 pts

3x M4A1 Sherman + 1x M4A1 Sherman con cañon de 76mm
385 pts

Priority Air Suport + Close Air Suport 
215 pts

Total 1505 puntos.

Libro: Desperate Meaures
Late War 1500 puntos
Tankovy Batalon
Confident Trained

HQ 
T-34/85 obr 1944
70pts

Combat Platoons:
Command T-34 obr 1942, 7x T-34 obr 1942
300 pts

Command T-34 obr 1942, 7x T-34 obr 1942
300 pts

Command T-34/85 obr 1944, 4x T-34/85 obr 1944
350 pts

Command SU-100, 3x SU-100 
310 pts


Spetsnaz Platoon Command SMG, 2x SMG, 2x Captured Sd Kfz 251

half-track- Panzerfaust Replace Command SMG with Command Panzerfaust

SMG
100 pts

Command DShK AA truck, 2x DShK AA truck 
55 pts

Total 1500 puntos.

Libro: Grey Wolf
Late War 3000 puntos
Panzerkompanie
Confident Veteran

HQ
Panzer 4 + -bergePanzer
195pts

Combat Platoons:
Panzer 4 (5) 450 pts

Panzer 6 (5) 940 pts

Tigre (4) 860 pts
Wirbelwind (2) 110 pts
SdKfz 7/2 (3.7 cm) 110 pts
Flak 88 (2)  115 pts

KW Inf Pack 40 (2) 115 pts 

Luftwaffe 100 pts

Y el reporte:

El despliegue alemán fue bien pensando, concentrando todo su poderío en el flanco izquierdo frente a los rusos. En el lado de los estadounidenses se ubicaron los Panzer IV, su misión era entretener a los Sherman en el pueblo mientras los Tigres y Panteras lidiaban con los soviéticos con apoyo de cañones y algún Stuka perdido.

El bando aliado no acordó ninguna estrategia ni el despliegue. Los rusos eligieron atacar la zona de un trigal que entusiasmó a los hambrientos soldados soviéticos que fueron castigados sin cena la noche anterior por tener pocas bajas en la última batalla. Los norteamericanos querían el pueblo para su gesta libertadora del yugo alemán e instaurar un polémico programa de Béisbol Para Todos con fondos del Plan Marshall.


Aquí los 88 alemanes, parte del enjambre de cañones antiaéreos que encontrarían los confiados aviadores norteamericanos.

Arranca la batalla. Como de costumbre los rusos aceleran sus tanques y se lanzan al trigal y también por un corredor en el extremo derecho. Los norteamericanos avanzan con displicencia pero ya celebran haber ocupado unos metros del camino que atraviesa el pueblo. Deciden detenerse allí y celebrar la Liberación de los Primeros 20mts del Camino Central. Mientras los yanquis cometen este desatino los alemanes ocupan posiciones defensivas entre las casas. Mientras tanto, los rusos empiezan a solicitar ayuda de los ociosos aviones norteamericanos, que son neutralizados por el fuego antiaéreo enemigo. 


Aquí los Sherman, y su lento avance, destruyen un Panzer escondido en una cabaña. Celebran la primera baja. Mientras tanto, los rusos se quejan por el lento avance de sus aliados.


Los alemanes esperan en sus posiciones y empiezan a matar a rusos principalmente, porque son los que más avanzan. Los T-34/85 de la unidad Dimitri Donskoi llegan al trigal y sus compañeros siguen su loca y suicida carrera contra los 88 alemanes. Pero entre los árboles aparecen los temibles Tigres para lidiar con los SU-100 rusos de la montaña Sur. 


Los Tigres se asoman en el bosque para disparar y luego ocultarse, cosa que pensaban hacer en toda la batalla pero tanta marcha hacía atrás y hacia adelante arruina los motores y a veces se quedan descubiertos a tiro de los SU-100, los que por su parte adolecen del más mínimo sentido de puntería. Ante tanta inoperancia de los tankistas un comisario encubierto anota sus nombres en una libreta...


Las cosas no van bien para los aliados, como se observa en la imagen de arriba. Si bien siguen avanzando sin plan ni destino, los alemanes les van produciendo bajas terribles. Los aviones norteamericanos, que se ufanaba con ser los mejores, caen como moscas...igual que los tanques rusos. Sin embargo, el entusiasmo no decae entre los estadounidenses que se ven alentados por destruir a un segundo tanque alemán. Hacen otro freno en su lento avance y celebran el hecho. Algo pasa desapercibido para los alemanes, un pequeño pelotón de desarrapados rusos que se esconden en el trigal y que podrían cambiar el curso de la batalla, "o no..."- replica un norteamericano receloso.


Una imagen de propaganda alemana muestra a los Panzer intactos escondidos en las cabañas con la intención de demostrar el control del pueblo al que bautizan Pequeña Hitlerina, una denominación ridícula que cuando llega a oídos del Fuhrer le genera un pataleo de 2 días que retrasa las órdenes y hacen caer varias ciudades en el Este.


Los norteamericanos rivalizan con la propaganda alemana y difunden esta foto de campaña entrando al pueblo con sus Sherman. Ya tienen un Multimedios de 3 radios, 2 diarios y 1 periódico infantil. En tanto, los rusos no tienen fotos dignas de mostrar.

A pesar de la falta de apoyo aéreo, el lento avance yanqui y la mortandad de rusos, la batalla avanza con algunos progresos.


Los norteamericanos consiguen abatir a más Panzer y avanzan otro poco. Un Stuka extraviado aparece y asusta a los tanquistas que detienen una vez más su marcha, para desesperación de los rusos.


Los Panzer arden y el pueblo Pequeña Hitlerina está por caer en manos aliadas para horror de sus tres habitantes: una oveja sin esquilar y dos gallinas.


Los Sherman toman el pueblo y se detienen para celebrar. Bautizan a Pequeña Hitlerina como 'Pueblo de la Libertad, la Democracia y el Bienestar'. La Calle principal pasa a llamarse Avenida Dr. Néstor Carlos Roosevelt. Se declara el Día de la Dignidad Yanqui como feriado puente. Ante este despliegue de populismo capitalista los rusos elevan protestas, pero pocos los oyen ya que ya han perdido una unidad de T-34 del flanco derecho y otra está muy ocupada esquivando a sus camaradas muertos.



Otra muestra el pavoroso poder de fuego alemán. Los Tigres hacen de las suyas jugando en el bosque, aunque a veces se atascan con alguna rama. Los tres Spesnatz rusos siguen avanzando en el trigal y preparan una sorpresa.


Otra toma del lento avance norteamericano, sin embargo destinan una unidad de Shermans a apoyar a los T-34 del centro pero es tarde, ya han muerto sin pena ni gloria. El Comisario anota sus nombres para castigos post-mortem. Los SU-100 no hacen nada relevante, en cambio los T-34 de la unidad Donskoi consiguen destruir un Tigre. Todo un logro que la propaganda comunista podría explotar sino fuera porque ya murió el reportero de la unidad a manos del comisario, por alguna razón que ya olvidó.


Es hora del heroísmo en el Ejército Rojo. Los tres Spetsnaz se lanzan al asalto contra los Tigres, saliendo del trigal en una imagen de conmovedora valentía y sinsentido. Los comandantes de los tanques, que intentaban sacar un gato atorado en una oruga, se ríen de ellos pero suben a sus tanques y abren fuego de ametralladoras. Hábilmente, el Sargento de los Spetsnaz toma a uno de sus soldados más obesos y lo usa de escudo humano. Su sacrificio valió la pena. El valiente Sargento Zardyn trepa a uno de los tigres y lo hace volar con un panzerfaust que había arrebatado a un miembro de las Juventudes Hitlerianas. Zardyn proclama: "fácil como quitarle el panzerfaust a un niño alemán".  Zardyn sigue su loca carrera y el segundo Tigre se retira. Cuando Zardyn celebraba la toma del bosque cae en cuenta que en su flanco derecho quedan en pie 4 Panther, 2 cañones Pak 38 y dos semiorugas cargados de ametralladoras MG a punto de freírlo. Considera que su gesta patriótica culminó y se esconde dignamente en un pantano.


El Tigre que ha sobrevivido al ataque de Zardyn se une a los 88 para frenar a los Sherman, que siguen su lento avance.



Los norteamericanos sufren el fuego alemán que padecieron los rusos. La aviación sigue acumulando chatarra en la retaguardia germana.



Hay también heroísmo en el bando norteamericano. Aquí vemos el duelo entre el comandante alemán y un Sherman que quiso sorprenderlo por la retaguardia. El novato tanquista yanqui Roger Magoo había logrado dar toda la vuelta al pueblo y se ubicó a 1 metro del trasero del Panzer IV del líder germano. No podía fallar, pero lo hizo y dos veces. Nadie sabe cómo no pudo impactar al Panzer, que luego se volteó y también a 1 metro devolvió el fuego. Pero también erró. El duelo siguió buen rato sin que nadie acertara al otro. Fueron dos verdaderos gladiadores de la ineptitud pero finalmente el Panzer estalló, nunca se supo la razón aunque se sospecha que fue uno de los muchos aviones aliados derribados.



Los SU-100 rusos se retiran detrás de un bosque. Los T-34/85 son destruidos. Pero el Ejército Rojo no se rinde, aún tienen una esperanza: el indolente y sucio Joseph Zardyn, escondido en el bosque con sus panzerfausts listos. Una vez más los alemanes subestimaron a Zardyn, al igual que los mismos rusos que al principio de la guerra lo destinaron a la cocina, donde era más letal que en el campo de batalla. Uno de los Tigres empezó a castigar a los Sherman y le dio la retaguardia al Sargento de los Spetsnaz que dejó una liebre que ya estaba devorando (viva, porque le gustaba la comida cruda) y se lanzó a buscar a su víctima. Trepó a la torre del Tiger y lo hizo estallar mientras en ruso señalaba a un colega aliado y con palabras fraternales le ofrecía la victoria en su honor: "es para vos, yanqui cornudo la p... que te p...". En la imagen inferior se aprecia el momento de gloria de Zardyn y su gesto de hermandad y tolerancia con los americanos.



Los alemanes dieron prioridad a capturar a Zardyn, pero éste se escondió entre los escombros del Tigre destruido esperando otra oportunidad.



Arriba puede observarse el estado de la batalla. Los alemanes han dejado a los rusos prácticamente fuera de combate y pueden tomar el trigal con los panteras y sus semiorugas para ir a buscar a los norteamericanos que nunca llegaron a auxiliar a los rusos.


Los Panther hacen su entrada triunfal al trigal, no es el Arco del Triunfo, pero es con lo que tienen que conformarse a esta altura de la guerra. A su lado los T-34/85 en llamas cubren su flanco izquierdo de los SU-100.


Otra toma aérea del combate, la batalla languidece. Los Sherman siguen limpiando el pueblo e intentan avanzar sobre la retaguardia y el frente de los alemanes. Los rusos hacen un último y desesperado intento por retirarse con dignidad de la batalla. Pero no lanzan a los SU-100 al combate sino que llaman al Sargento Zardyn desde su escondite de escombros humeantes para atacar al último Tigre en pie en un asalto frontal y en terreno abierto. Una batalla de tan alto riesgo como estupidez y futilidad. Tras maldecir a sus superiores, Zardyn toma su último panzerfaust y un trago de combustible de un charco, a falta de su vodka y se lanza sobre el Tigre. Los alemanes abren fuego con todas las armas del tanque, un oficial de los cañones de 88mm que estaba en una letrina dispara su pistola, un médico lanza jeringas usadas y un capellán arroja agua bendita. Zardyn muere acribillado, sus últimas palabras escritas con su sangre marcan su epitafio: "acá me la pusieron por culpa del Alto Mando, pero bien que les cabió a esos dos tigres".



La caída de Zardyn, un héroe incomprendido adelantado a su tiempo.


Con la muerte de Zardyn, el Ejército Rojo se retira y les deja a los yanquis la tarea de seguir la inútil batalla.



Aquí, un horrible Bergepanzer desafía a los estadounidenses escondido entre dos casuchas.


Llega el fin. Los panteras se unen al Tigre y arrasan a los Sherman del sector centro. Los norteamericanos se retiran más rápido de lo que avanzaron en la batalla. Comienza el desfile de los vencedores germanos sobre la Avenida Dr. Néstor Carlos Roosevelt ante la emocionada multitud conformada por las dos gallinas y la oveja sin esquilar.




1 comentario:

  1. Como comandante norteamericano de esta batalla, certifico que 99% de todo lo dicho es cierto. Go Allies! :p Jajjajaj muy bueno!

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